Cuento «El héroe Diego» (Félix Fernández)

Un cuento lleno de dulzura, de valentía, motivaciones, lucha y héroes, muchos héroes. Y no podía tener a un mejor protagonista, DIEGO, y a una familia a la que admiro, a la que quiero, de la que aprendo y a la que tengo mucho que agradecer.

Diego es un héroe, y se convierte en el héroe de todo aquel que mira por un solo instantante con sus ojos.

Recuerdo el primer día que me senté con él y me emociono al recordarlo, sus ojos, su conducta, su sonrisa.., me pedía aprendizaje y disfrute, hasta que esa bonita sonrisa se transformó en preciosas palabras, pero no en cualquier sonido, en un especial «uno, dos y tres» los cuales marcarían muchos de tantos aprendizajes que hace cada día.

Aquí tenemos un bonito cuento, no uno cualquiera, nuestro cuento, el que nos emociona cada día y por lo que queremos compartirlo.

Félix Fernández es el autor de este cuento, el tío de Diego, pero lo importante no es su parentesco, es Félix, es corazón, alegría, sensibilidad, amor, humildad, caballero, infancia.., es una persona a la que conozco poco a poco y me encanta descubrir, una persona que transmite. Y a su lado está M. Jose, la mujer más luchadora y esperanzadora; junto a su maestra, su increíble madre; su hermano Carlos, bondad y alegría; Javi, el papá, que les descubre y hace disfrutad del entorno; Hipo, esta preciosa perra que derrocha amor; muchas más personas que están ahí día tras día; nuestra princesa Carla y el pequeño y gran héroe DIEGO.

GRACIAS FAMILIA.

 

Cuento: «el héroe Diego» (Félix Fernández).
 

A veces… uno es fan de un grupo, de un artista, de un pintor, de un actor…Yo soy fan de mi sobrino Diego…no porque sea mi primer sobri, ni por amor de tío…es por lo que es…y lo que hace…hay personas que brillan, personas que dan luz y calor… como si fueran estrellas recién nacidas que viven entre nosotros…esas personas nos orientan en la oscuridad, nos dan calor en las noches más frías, nos enseñan y demuestran…que hay otros caminos y otras maneras de vivir y sentir la vida…

Yo soy fan de Diego…desde que estaba en la tripa de mi hermana, ya era una estrella…no por que fuera el protagonista, que lo era, si no porque en ese momento… mi Padre estaba peleando contra el cáncer, la gestación y nacimiento de Diego le salvó…salvar no es curar, salvar es… llevar a alguien a un lugar o estado donde se siente seguro y querido.
Diego también salvó a mi Hermana…no sabéis lo fuerte y lo valiente que es Marijose, mientras todo empeoraba…ella nos traía la esperanza…traía vida a ese triste hospital…y eso le ayudaba infinitamente, porque sentía que estaba salvando a mi Padre y así lo estaba haciendo.
Diego también salvó a mi Madre, ella siempre fue madre…todo lo madre que una madre puede llegar a ser, y ser abuela era algo, que llevaba esperando desde que yo nací…imagino que en las noches que nunca se acababan en el hospital, ella a veces sonreía…solo de pensar en todos los besos y abrazos que tenía guardados para Diego…y que mi Madre estuviera contenta y emocionaba, hacía que mi Padre durmiera mejor…
Y Diego me salvó a mí, os prometo que me salvó…os cuento porque…hablé mucho con mi Padre en ese tiempo, siempre tuvimos una relación muy muy especial, eso hacía fácil el querernos con esas ganas…yo siempre le decía…”seguro que has conocido a un montón de gente, que… tomando una caña te han ha dicho………pues a mi los médicos me daban tres meses…y mira…aquí me tienes 15 años después…a que si? Que esto no son matemáticas Padreeeee!!!.…se trata de esforzarse y de pelear, eso me lo has enseñado Tu… tienes que darlo todo Padre…tu no te estás muriendo, tu ahora estas peleando con tu enfermedad…va a ser un combate durísimo, pero al final terminarás de pie, igual hasta con un pulmón menos, pero ganaras…, eres mi héroe…tienes que ser valiente” . Os aseguro que se lo decía porque yo también estaba peleando, con el…se que eso le ayudó mucho, pero a medida que empeoraba, se perdía el mensaje…perdíamos la batalla….y apareció mi hermana con la gran noticia…estaba embarazada…y ya no tuve que sacar al guerrero que vivía en mi Padre…apareció como el caballo de Espartero…ese que tenía los huevos muuu gordos…jajajajja, la frase de mi Padre cambió…se convirtió en “ Tengo que conocer a mi nieto” . Mi Padre estaba peleando…en vez de triste y derrotado…sentía que estaba a salvo…y todo…gracias mi sobri.
Diego nació…ya nos regaló sus risas y también sus llantos…yo le cantaba la canción del botón de Martín…y el ratón chuiquitín..tin tin tin…esa es nuestra canción…todas las historias de amor deberían tener una canción..no creéis?… paso el tiempo…y mi Padre mejoró contra todo pronóstico…en esos meses..de alegría…por algo que aún no comprendíamos…Diego solo se conectaba con mi Padre…al resto nos dedicaba ratillos concretos de atención…pero era alucinante ver a los dos mirarse…era como si estuvieran hablando o sintiéndose…o queriéndose, a diego le fascinaba mi Padre…le miraba y le sonreía…le tocaba la cara…le balbuceaba…cuando lloraba…mi Padre le calmaba…en fin, algo muy especial pasó entre los dos.

Pasó el tiempo, mi Padre empeoró…y empeoró…y después de eso…empeoró otra vez…la última noche que pasé en el hospital con el, hablamos hasta la madrugada…le di las gracias por ser el mejor padre del mundo entero y le dije que estaba orgulloso de el…que había conocido a su nieto…que era mi héro…esa es una bonita despedida…sin Diego no hubiéramos llegado ahí…me salvó por segunda vez…a mi… y a mi Padre y a mi Madre y a mi Hermanito Carlos.
Te imaginas que aparece un Super héroe…cuando parece que todo está perdido..y te salva a ti y a toda tu familia? Mi agradeciendo sin caducidad a Diego, a mi sobri..a mi héroe.

Esto es solo el resumen de la primera parte de las Aventuras de Diego…hay ya más capítulos..y aún vendrán muchos más.